Se detectó un caso de coronavirus en el sistema de salud pública provincial
Otra vez el gobernador Alberto Rodríguez Saá cargó contra un paciente de COVID-19. Dijo que hubo “negligencia grave” del trabajador del hospital.
El Gobierno informó que uno de los dos nuevos casos de coronavirus es “un empleado del Hospital San Luis que se desempeña en terapia intensiva y que mantuvo un contacto estrecho con un transportista de Buenos Aires también diagnosticado con COVID-19”.
El Gobierno tiene como mayor responsabilidad el sistema de salud pública. Un paciente fue a la unidad de terapia intensiva y un trabajador se contagió.
“Es uno de los peores días que nos ha tocado. La gran preocupación es que el positivo en el Hospital fue a trabajar con síntomas. Calificaría al tema como una negligencia grave”, así reaccionó el gobernador Alberto Rodríguez Saá esta noche tras dar la información.
No es la primera vez que el mandatario apunta los cañones y transfiere la responsabilidad hacia afuera, es decir contra el paciente de COVID-19
El productor de Tilisarao Gilberto Bongiovanni se convirtió en lo que va de la pandemia en el ciudadano más conocido y repudiado de San Luis. Se trata del polémico caso de coronavirus “leve”.
Su nombre llamativamente inundó las redes sociales ni bien el gobernador terminó el reporte en el que informó el contagio.
Rodríguez Saá lo criticó públicamente y hasta se le pidió a la Justicia que ordenara la difusión del nombre. En varios de los informes que se emiten por Canal 13 y la agencia de noticias y son reproducidos en cadena por las redes sociales de la mayoría de los medios, lo acusó de “no colaborar” y también se le achacó una conducta “irresponsable”.
El Gobierno nunca se hizo cargo del manoseo y el escrache que sufrió un ciudadano, más allá de que se pueda cuestionar algunos aspectos de la conducta individual. Tampoco asumió que el productor había salido de San Luis con autorización. Las autoridades de San Juan comunicaron que había ingresado en forma legal a esa provincia.
En el “caso Bongiovani” quedó expuesto el Comité de Crisis y los especialistas se vieron obligados a dar una conferencia de prensa y recorrer los medios para dar explicaciones. Los profesionales pagaron el costo porque el gobernador y la jefa de Gabinete se corrieron de la escena.
Rodríguez Saá siempre habló de Bongiovani. Ni siquiera ensayó una autocrítica sobre las fallas del Gobierno y el Comité de Crisis.
Este lunes fue el turno de un “trabajador de la salud”.
“Me preocupa porque calificaría al tema de negligencia grave”, fueron las palabras de Rodríguez Saá refiriéndose al enfermo. En rigor es un médico residente, según confirmaron desde APTS.
Así una vez más desvió toda la atención en el paciente.
Hay que llamar las cosas por su nombre. Lo que se detectó fue un caso en el sistema de salud pública que gestiona el Gobierno de Rodríguez Saá.
Definitivamente Rodríguez Saá está decidido a transferir la culpa a los demás. En la lista están: Bongiovani, los camioneros, comercios que “incumplen” los protocolos y ahora el trabajador de la salud.
A quienes piden más de una vez la habilitación de una determinada actividad e insisten públicamente con el reclamo, se los desacredita por “inescrupulosos”, desde sectores del oficialismo.
Aquellos medios que no se subordinan a la línea oficial se los califica de “anticuarentena”. A los dirigentes que critican también se les endosa el mismo rótulo.
Cada vez se nota más la improvisación del Gobierno en distintos frentes y lo dramático es que no asume los errores que le permitirían corregir el rumbo.
Frente a cada caso nuevo Rodríguez Saá reacciona de la misma forma: la culpa la tiene el otro y apela a la fórmula del miedo.